jueves, 26 de noviembre de 2009

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Lévi-Strauss y la Teoría de la Alianza



Ha muerto Lévi-Strauss.
A los no familiarizados con la antropología, este nombre les dirá poco pero Lévi-Strauss ha sido uno de los grandes antropólogos de todos los tiempos, estudioso teórico pero también etnógrafo e iniciador de la "revolución estructuralista" en la disciplina, principalmente en los ámbitos del parentesco, la mitología y el simbolismo en general.
Una de sus mayores aportaciones circunscrita al campo de la antropología del parentesco fue la llamada "teoría de la alianza".
En términos sencillos, para Lévi-Strauss el paso de la naturaleza a la cultura viene dado por el tabú del incesto, única regla con caracter universal aunque no siempre desarrollada de igual manera. Es decir, en todas las culturas existe pero con diferencia respecta a la amplitud de los miembros de la familia que están incluidos en el tabú. Así, mientras en algunas sociedades está prohibido el matrimonio entre primos en otras se favorecerán estos mismos matrimonios o incluso existirán otras formulaciones del tabú (por ejemplo, entre los kubeo de América del Sur el rito de iniciación a la edad adulta de los hombres conlleva mantener relaciones sexuales con sus propias madres).
En todo caso, esta prohibición del incesto implica la necesidad de buscar fuera del entorno de la familia una mujer (imperativo de exogamia) que conlleva una regla de reciprocidad ("yo cedo a las mujeres de mi familia a condición de que los demás también lo hagan"). Si a esto añadimos el concepto de "organización dualista" por la que se priman ciertas alianzas con determinados grupos en detrimento de otros grupos, ya tenemos una idea de cómo se estructura la sociedad.

¿Anticuado? ¿adecuado sólo para sociedades "primitivas"? durante mi estancia en Trabzon en el norte de Turquía pude comprobar como los noviazgos con primos y otros parientes consanguíneos más lejanos eran exhibidos con orgullo. Igualmente, resultaba "deseable" el noviazgo (y posterior matrimonio) con vecinos y entre los universitarios veinteañeros resultaba un problema de difícil solución la oposición familiar a una relación con una pareja de otra ciudad.